Abstract:
Actualmente en Colombia la comunidad atraviesa una serie de dificultades dado que no se cuenta con la adaptación de las herramientas necesarias para intervenir en la salud mental en esta población. Si bien existen intérpretes que colaboran en el proceso de comprensión entre un paciente con discapacidad auditiva y el psicólogo, esto no garantiza un diagnóstico o la aplicación correcta de un instrumento, teniendo en cuenta que muchos intérpretes no suelen tener total claridad del tema y de las diferencias existentes entre el lenguaje hablado y la Lengua de Señas Colombiana (LSC), lo que genera alteraciones en el resultado de dichos procesos. Por lo tanto se desarrolla la primera fase de adaptación de un instrumento (Cuestionario Autoesquemas (CIE) Con el cual se pretende saber si la población comprende en su totalidad las preguntas del cuestionario y lograr entonces continuar con las siguientes fases. En el desarrollo de la primera fase las personas evaluadas evidencian diferentes interpretaciones de las preguntas y sus respuestas, es decir, que los cuestionamientos son ambiguos para ellos dado que algunas palabras del lenguaje hablado no tienen señas asignadas o tienen significados diferentes en su lengua. Lo anterior genera un nuevo interrogante y es saber si la adaptación a LSC sea la mejor opción para evaluar a la comunidad Sordo, dado que existen incontables variables que aún afectan los resultados y necesitan ser estudiadas y evaluadas para perfeccionar la práctica. Por el momento solo se puede decir que se precisa un análisis más detallado de la lengua de la comunidad y de los cuestionarios utilizados para garantizar así resultados acertados y con el mínimo margen de error.