Abstract:
La lectura es un vínculo que favorece el acceso a la información, al conocimiento, al goce estético; sin embargo, ésta solo se reivindica con su propósito principal cuando logra ser percibida por el individuo como una experiencia de evolución y reafirmación de su propio juicio ante el lenguaje escrito, oral y las distintas circunstancias que se le presenten durante la existencia. Infortunadamente, cada día aumenta el distanciamiento y rechazo de las personas y hasta de la población estudiantil por cualquier actividad que signifique leer, imposibilitando cualquier iniciativa libre y autónoma de encuentro con este proceso. En primer lugar aparece el hogar como el contexto donde se comienzan a interiorizar y construir las maneras de asumir los problemas, de pensar, actuar y comunicarse con los demás pero que otorga dicho estimulo lingüístico a la escuela y ésta por su parte emprende una alfabetización formal del proceso lector por imposición y normatividad que ciega toda posibilidad de placer en el afán de formar individuos capaces de realizar análisis semánticos. El ámbito escolar y sus actores responsables de diseñar las estrategias de acción dentro del aula deben convertirse en ente garante de ambientes y modelos propicios para promocionar la lectura desde un sentido placentero, creativo y que desarrolle la personalidad. Por lo tanto, después de detectar la ausencia de hábitos lectores y apatía que manifiestan los estudiantes de la Institución Educativa Manuel Uribe Ángel con todo lo relacionado a la lectura reflejado puntualmente en la desmotivación, negación, oposición y apatía que expresan éstos ante las propuestas realizadas por los maestros se ve pertinente investigar para detectar las causas que están generando tales actitudes en esta población estudiantil y tal vez buscar unas oportunidades de mejora.